SEMENTALES DE CORRO PARA LA HISTORIA: JARDINERO

Comenzamos una nueva sección en la que queremos descubrir toros que marcaron el devenir de las ganaderías destinadas a los festejos populares, que con su influencia establecieron un patrón y una descendencia genética única. Sementales que pasarán al recuerdo por la transmisión de sus buenas aptitudes y las de sus antepasados.

Hemos escogido el toro Jardinero de la ganadería de l'Hortolà para iniciar esta andadura. Semental que nació y se crió en casa de los Hnos. Salvador y que pasó los últimos años de su vida en manos de Miguel Parejo. 

Toro Jardinero de l'Hortolà.

Gracias a Miguel, hemos podido reconstruir el origen, historia y descendencia de este gran raceador.

ORIGEN DEL SEMENTAL

Árbol Genealógico

Padre y ascendencia

El padre de Jardinero era el toro Caramelo, de capa castaña y bien armado por delante. Muy buen astado en la plaza, saltaba el banco con facilidad y tenía muy malas ideas. El defecto que tenía y que transmitió a su hijo, era un criminal con las vacas dentro del corral, siempre agujereaba alguna. Y además uno no se podía fiar de él. Realizó muy buenas actuaciones en Cabanes y Les Coves.

Caramelo fue adquirido cuando tenía tres años por el abuelo Hortolà a Ramón Ángel Marín. Era hijo de la vaca Taronja con el hierro de Oña. Esta vaca estuvo en manos de varios ganaderos. Como hemos comentado nació en casa de Oña, siendo la única vaca colorada que tenía por aquel entonces. Posteriormente la vendió a Miguel Vilar "Lucas" y de aquí pasó a manos de Ramón Ángel Marín.

A su vez, Taronja era hija del toro Morico de Oña y de una vaca de Serviliano Cervera. Nos comenta Parejo que se decía que esta vaca era cruzada de una vaca de labranza. La cuestión es que Taronja salió muy brava y sacó muy buena raza, pero eso sí, era algo parada, en diez metros hacía su trabajo.

El padre de Caramelo era el toro Bailador, un ejemplar castaño y bragado, hijo de la vaca Bailadora y el toro Primero, que venían del primer ganado que hizo el abuelo Hortolà. Este toro Bailador lo vendió José Salvador a Ramón Ángel de becerro, y éste lo echó a las vacas. 

Cuando hizo el segundo ganado, l'Hortolà siempre fue en busca de aquellos ejemplares que había vendido y que sabía que venían de buena reata. Con Caramelo en sus filas, no dudó en tirarlo a las vacas ya que conocía perfectamente su ascendencia.

Un tiempo más tarde, Octavio Besalduch le vio realizar varias buenas actuaciones y se encaprichó de él. Parejo le hizo el trato al abuelo Hortolà y Octavio pagó por él 250.000 pesetas de los años ochenta. Como anécdota contar que Octavio lo sacó en un par de ocasiones. En la primera en Les Coves fue muy bueno. Posteriormente el toro se emorrilló y engordó bastante y en la siguiente actuación en Torreblanca se ahogó muy rápido. Como ese día no le gustó, se lo vendió a Gerardo Gamón de Albalat dels Tarongers.

Toro Caramelo en Les Coves. Foto cedida por Miguel Parejo.

Madre y ascendencia

La madre de Jardinero era la vaca Clavellina. Cornalona, muy guapa, chorreada de capa, y muy buena y seria. Muy completa, saltaba el banco, subía al tablao, siempre hasta el final, ella sola se buscaba la faena.

Clavellina nació en casa de L'Hortolà. Su madre era la vaca Sultana, una vaca negra con un cuerno roto caido. Se arrancaba mucho en el corral y solo la utilizaban en los pueblos de la parte de Tarragona, ya que allí los corrales estaban partidos. Todo lo contrario que en los de Castellón, donde era un problema manejarla. Africana era la madre de Sultana, que procedía del ganado de Los Chatos de Torreblanca. Éstos la vendieron de becerra a Zorrilla, y el abuelo Hortolà se la compró cuando se hizo el segundo ganado. Africana era hija de la vaca Farola de Los Chatos.

El padre de Sultana era el toro Floriste, un ejemplar berrendo en negro, tocado de un pitón. Floriste era hijo de la vaca Florista del primer ganado de l'Hortolà. Lo vendió a un camping de Vinaroz de becerro, y allí se rompió un pitón. Lo recogió el Charnego, y de él vienen todas las capas berrendas que tiene este ganadero. Más tarde cuando el abuelo Hortolà construyó el segundo ganado, recogió el toro y lo echó a las vacas. La vaca Palmera de Parejo era hija del toro Floriste. El padre de Floriste era el toro Primero.

El padre de Clavellina era el toro Africano, que venía de la misma vaca Africana y del toro Floriste, comentados ambos anteriormente.

Clavellina en acción en La Ribera de Cabanes.

Clavellina en el campo.

MORFOLOGÍA Y COMPORTAMIENTO

El toro Jardinero iba marcado con el número 90, era de pelaje chorreado en morcillo, estaba bien armado por delante y era de talla media.

De comportamiento destacaba por pegar muy fuerte, tenía mucha movilidad, y era muy rápido. Como su padre, también era un criminal en el corral. Parejo lo recuerda de cuando lo tenía el abuelo Hortolà por sus grandes emboladas. Una noche lo llevaron a Gaibiel y estuvo fuera de serie. También recuerda otra embolada en La Puebla de Valverde. 

Jardinero de novillo en Borriol en el año 1989. Foto de Enrique Aragó.

HISTORIA DEL SEMENTAL

El toro Jardinero nació en la casa Hortolà, marcado con la HS de Hermanos Salvador, los hijos de Jose Salvador, nombre del abuelo Hortolà. Padreó algunos años y lo eligió como semental porque tenía todo lo que tiene que tener un buen raceador: un toro de pelea, movilidad, bravo y de muy buena reata (su madre era muy buena). Su principal cualidad era que sacaba muy buenos productos. El principal descendiente en esta casa hijo del Jardinero fue el toro Madrileño, que tantos éxitos les dio.

Jardinero con el resto del ganado de L'Hortolà y el pastor "Chiquilín". Fotos cedida por el ganadero.

Se aprecia el pelaje chorreado en morcillo y su seriedad por delante.

Miguel Parejo adquiere el toro con ocho años, y el trato para la compra es algo curioso. Estaban detrás de él Fernando Mansilla "Pusa" y Francisco Tárrega "el Gallo" tentando para que se lo vendiera. En cuanto Fernando Salvador se entera, le llama a Miguel diciéndole que se quieren llevar el toro. Jardinero ya era mayor y el abuelo Hortolà tenía miedo que se lo mataran los otros (por aquel entonces estaban todos juntos, no había sitio para separarlos). Parejo fue a hablar con ellos y decidieron que se lo llevara él. Le ofrecían 150.0000 pesetas y Miguel les dijo que se lo quedaba por ese dinero si Vaquero, un hombre de Cabanes, le dejaba un corral para apartar a los tres toros que llevaba con las vacas. Si los hubiera juntado se hubieran matado. Así fue, Vaquero le cedió un corral, apartó a los toros y Jardinero subió de la Ribera a Cabanes. Automáticamente Parejo puso el toro con las vacas.

Lo tuvo tres años con ellas y le sacó alrededor de 70 crías. Nos comenta Miguel que todas sus hijas eran unas bandidas en el corral, pegaban a las otras. Había ocasiones que a alguna necesitaba atarla en el camión. También llegó a trabajarlo un par de años, sobre todo embolado.

El toro Jardinero se murió en el corral del monte Miravet, lo descubrió muerto el pastor, estaba junto con otro  astado de nombre Carbonero que era más joven. No se pelearon, seguramente murió de alguna enfermedad, como no los vacunaban por aquel entonces debió coger algo y murió.

Destacar también que del ganado de Parejo de aquella época, hubo dos vacas muy buenas que eran hermanas de Jardinero por parte de padre, Artista y Clavellina, ambas hijas del toro Caramelo.

Vaca Clavellina en primer plano, al fondo Artista, ambas hermanas de Jardinero. Foto: Centelles.

DESCENDENCIA DEL SEMENTAL

Jardinero dejó su semilla principalmente en las ganaderías de  L'Hortolà y Miguel Parejo, pero también en algunas otras.

Como hemos comentado, el principal producto en casa de L'Hortolà fue el toro Madrileño, uno de los toros más completos de los años noventa y que destacó en los míticos concursos de por aquel entonces. 

Toro Madrileño nº 90. Foto cedida por el ganadero.

Madrileño en Benasal. Foto: Centelles.

Madrileño también lo tuvieron en las vacas y muchos de los descendientes actuales en la ganadería de Hnos. Miró, proceden de él, y por ende, de Jardinero. 

El toro Trampiste de Miró, importante semental de los últimos años, es bisnieto de Jardinero, hijo de la vaca Rubia, cuyo padre es el Madrileño. 

Otro toro que venía por ambas partes del protagonista de este reportaje, es el toro Salamero. Hijo del Madrileño y de la vaca Salamera, que era hija de la vaca Clavellina y de Jardinero.

Salamero, bisnieto de Jardinero.

En casa de Parejo dejó muy buenas vacas, Polvorilla, Mariposa, Africana, Salerosa, Portuguesa, eran hijas de él, por nombrar algunas. 

También dejó hijos importantes: Presumido, Naranjito, Tabernero e Islero, este último estuvo dos o tres años en las vacas, su madre era la vaca Bandera.

Vinagra por ejemplo, era hija del toro Presumido, nieta de Jardinero. Islero fue el padre de vacas como Pantera y Garbosa. Y Rondallera era hija de una vaca cuyo padre era el toro Presumido, bisnieta de Jardinero.

Polvorilla.

Mariposa.

Presumido. Foto: Vicente Ferrando.

Islero. Foto: Salva Serrano.

Pantera. Foto: Salva Serrano.

Vinagra. Foto: Salva Serrano.

Rondallera, bisnieta de Jardinero. Foto: Salva Serrano.

Si hablamos de otras casas ganaderas, Jardinero también estuvo cubriendo vacas de Daniel Crespo "Oña", Parejo se lo prestó durante un tiempo. Avión fue uno de los hijos que más destacaron.

Por otra parte, en casa de Mansilla y de Armando Beltrán también hubieron dos hijos importantes: Caramelo y Floriste. Jaime Tárrega también echó a algunas vacas un nieto, del mismo nombre, que era conocido como "el Cremat", ya que tenía la espalda quemada de una embolada  en Chodos.

Caramelo de Mansilla. Foto: Juan Carlos Vilar.

Floriste de Armando Beltrán. Foto: Juan Carlos Vilar.

Jardinero "el Cremat" de Jaime Tárrega "Lucas", nieto de Jardinero. Foto: Salva Serrano.

A la postre, Jardinero resultó un toro decisivo en el porvenir de dos ganaderías muy importantes de la provincia de Castellón, un legado genético que ha perdurado durante muchos años. Que construyó el abuelo Hortolà, ha continuado Miguel Parejo y se mantiene en la ganadería de Hnos. Miró.

Quizás si nos remontamos a sus antepasados podríamos descubrir posiblemente que Jardinero provenía de la ganadería de Samuel Flores, de ahí el típico pelaje chorreado en morcillo. En sus orígenes allá por los años cincuenta, José Salvador realizó la compra más importante a Simón de Segorbe, una punta de vacas oriundas de Samuel Flores.

Historia viva del ganado de corro, que debemos mostrar y compartir para poner en valor esta profesión. Una selección de muchos años que ha dado un toro de lidia particular y peculiar, con su morfología y caracteres únicos en el mundo, y destinado a dar espectáculo y emoción en los festejos populares.